San Vicente | Nació en 1982, el año de la Gesta de Malvinas, sin saber que años más tarde se iba a sumergir en la movida malvinera que surgió en el distrito de San Vicente de la mano del recordado y querido Rubén Ramírez. Llegó al atletismo por accidente, pero se enamoró de este deporte, que lo llevó a representar al país en la tradicional prueba de San Silvestre y en la maratón más austral del mundo, en nuestro Puerto Argentino. Se llama Jorge Rubén Mourelle.
Su llegada al atletismo se dio a finales del siglo pasado. Jorge era arquero de uno de los tantos equipos dirigidos por Rubén “Narigón” Arenas. “Me acuerdo que se me rompieron los ligamentos cruzados de la rodilla derecha y mientras esperaba una recuperación, comencé a correr para mantenerme en estado. Me di cuenta que no podía jugar al fútbol, pero corriendo, la rodilla no me molestaba”, contó “El Correcaminos” a ActivaSport.
En el año 2000, el Sindicato de Trabajadores Municipales de San Vicente organizó una carrera de 7 kilómetros y, ávido de competir, Jorge se anotó. “Me acuerdo que gané en mi categoría y quedé tercero en la general. Esa competencia hizo un click en mi vida de deportista y decidí a tomarme más en serio esto de correr”, confesó.
Tímidamente, Mourelle comenzó a participar en distintas competencias regionales hasta que en 2001 participó en la Maratón Desafío San Vicente, organizada por el Equipo ActivaSport. “Era una competencia de 8 kilómetros entre el Centro Cívico de Alejandro Korn y la Laguna de San Vicente. Esta fue una competencia de mayor nivel, porque vinieron atletas de otros puntos de la provincia y quedé tercero en mi categoría”, remarcó el deportista.
Hoy Jorge es un formador de atletas, pero no olvida su comienzo a las órdenes de Fernando Lezcano. “A Fernando lo conocí en 2002 y fue mi entrenador hasta 2007. Lo recuerdo con afecto porque ahí comenzaron mis logros, ganando carreras y estando casi siempre en la punta”, reconoció Mourelle.
Con Lezcano llegó uno de los mayores logros para Jorge, hasta ese momento: correr la tradicional prueba de San Silvestre, que se disputa todos los 31 de diciembre por las calles de San Pablo, en Brasil. “Hubo un gran Prix de ocho fechas, clasificatorio para participar de la San Silvestre. Estaba muy entusiasmado y pude ganar seis de las ocho competencias, representando a la Argentina en el año 2005”, rememoró.
En la carrera de Mourelle hay momentos inolvidables como los campeonatos Metropolitanos en 5, 10 y 15 kilómetros y muchas otras carreras y títulos ganados, pero nada se compara a haber pisado el suelo de nuestras Islas Malvinas en dos oportunidades, para participar de la Maratón de Puerto Argentino, la competencia atlética más austral del mundo.
Maratón de Puerto Argentino
“En 2014 comencé a entrenarme para participar en la edición 2015. Estaba súper ‘afiladísimo’, muy bien preparado y con la seguridad de ir a hacer un muy buen papel. Lamentablemente tuve un accidente en la zona del puerto la noche anterior y esto hizo que tuviera que abandonar en el kilómetro 18 de la prueba”. Un año más tarde hubo revancha: Jorge, con Pablo Matayoshi, Alejandro Canales y Adrián Sandoval -haciéndole el aguante- logró el tercer puesto de la general, compitiendo con atletas de todo el mundo. “Fue algo que nunca voy a olvidar, porque fue una mezcla de emociones que solamente un amante de nuestras islas puede entender. Fue, hasta el momento, la carrera más importante de mi vida”.
En 2006 se recibió de profesor de Educación Física y un año más tarde, de entrenador deportivo. Hasta diciembre del año pasado se desempeñó como el titular de la Escuela Municipal de Deportes de San Vicente. Participó como atleta y como parte de la organización de la serie de pruebas “San Vicente corre por Malvinas”, organizadas por el Rotary Club de San Vicente y el Centro de Héroes de Malvinas de ese distrito.
Hoy, mientras quema sus últimos cartuchos, se dedica a entrenar a otros atletas y a buscar nuevos talentos, aunque tiene la mira puesta en un solo lugar: la edición 2022 de la Maratón de Puerto Argentino. “Quiero festejar mis 40 años ganando esa carrera. Seguramente será la última gran competencia que correré, por mi edad, pero me mueve algo especial a ir una vez más a ese lugar y rendirle un homenaje mayor a nuestros héroes”, finalizó.