Avellaneda | La protesta de las familias que habían sido desalojadas hace cerca de un mes de un predio usurpado en Guernica, se trasladó a la ciudad de Avellaneda. Esta mañana, el paso vehicular en el puente Pueyrredón amaneció cortado por agrupaciones de izquierda y estudiantes, que apoyan el reclamo de viviendas a los gobiernos Nacional y Provincial. El corte es total y está provocando grandes inconvenientes.
Las organizaciones acompañan a las familias que ocuparon los predios desalojados en Guernica para reclamar «por tierra para vivir, vivienda y trabajo digno». Los manifestantes se concentraron hoy, a partir de las 6 y adelantaron en un comunicado, que el reclamo se extenderá, por lo pronto, durante toda la mañana.
El reclamo se da a poco más de un mes del desalojo que llevó a cabo el gobierno de la provincia de Buenos Aires, el 29 de octubre pasado en el predio de los barrios San Martín y Numancia Sur, en Guernica. Ese lugar, de casi 100 hectáreas había sido tomado –en forma ilegal- el 20 de julio pasado por cerca de 2.500 familias, hasta su desalojo, en donde se registraron 30 detenidos y 25 heridos leves, debido al enfrentamiento con las fuerzas del orden.
Durante el desalojo del 29 de octubre, la policía no utilizó armas letales por orden del ministro Sergio Berni.
“Desde el desalojo, hace 40 días, el Gobierno bonaerense no ofreció ni un metro de tierra a los vecinos desalojados, por eso mañana acompañaremos su reclamo”, le había manifestado a la Agencia Télam el dirigente del Polo Obrero Eduardo Belliboni. Una de las manifestantes, que se identificó como Juana, de 54 años, explicó que reclaman «tierras para poder vivir ya que lo que nos ofrece la provincia, no nos alcanza y necesitamos, básicamente terrenos. Mis chicos tienen casa pero yo soy una mujer adulta y no voy a ir a vivir con ellos. Necesito que además de los 30 mil pesos que ofrecen las autoridades nos den un terreno para construir».
Las organizaciones sociales, en conjunto con las familias desalojadas, le exigen al gobierno de Axel Kicillof que «deje de privilegiar los intereses» de la empresa que adujo ser dueña de los terrenos.
El operativo, encabezado por el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni, contó con 4.000 efectivos policiales. En esa oportunidad, Kicillof, sostuvo que de no haberse producido el desalojo, la jurisdicción habría concurrido en «desacato» y puntualizó que el operativo se realizó «con todos los cuidados posibles para evitar heridos y situaciones de violencia».
El desalojo fue ordenado por el juez de Garantías Martín Rizzo, quien había fijado como fecha límite el 30 de octubre, luego de prórrogas anteriores que habían sido acordadas con las autoridades provinciales para avanzar con el proceso de relocalización de las familias.