San Vicente | En el marco del endurecimiento de la cuarentena por la pandemia de COVID-19, el Municipio de San Vicente previó nuevas medidas sanitarias como la instalación de cinco arcos sanitizantes para vehículos y la continuidad de la desinfección con agua clorada en la vía pública.
Si bien era un secreto a voces, ayer el presidente de la Nación anunció la vuelta a la fase uno de la cuarentena en varios distritos de la provincia de Buenos Aires, listado que incluyen a San Vicente, Presidente Perón y otros de la zona del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Megaoperativo de control vehicular en el Cruce de Alejandro Korn.
En virtud de estos sucesos, el gobierno de Nicolás Mantegazza dispuso la instalación de cinco arcos desinfectantes en todos los retenes de ingreso y egreso al distrito, que la Comuna había dispuesto hace más de dos meses.
Los vehículos que pasen por estos lugares, deberán pasar por debajo del arco, que pulverizará una solución desinfectante sobre el mismo. El dispositivo posee un sensor que detecta el paso del auto o camioneta y arroja el desinfectante durante 6 segundos. Desde el área de Salud municipal afirmaron que este líquido no produce efectos negativos sobre la pintura de esos vehículos.
Durante la jornada de ayer, se continuó con la desinfección masiva en la vía pública con un pulverizador de arrastre que arroja una solución clorada sobre calles y veredas.
Esta acción se llevará a cabo en los puntos del distrito con mayor circulación de personas, como los centros comerciales, zona bancaria y estación de trenes.
En diálogo con la prensa, Mantegazza señaló que con los anuncios de Fernández “se van a endurecer las restricciones en los controles vehiculares, por eso le pedimos a los vecinos tomar más precauciones, porque para que esta cuarentena sea un éxito es fundamental el rol individual de nuestros vecinos y vecinas”.
Según el mandatario, “el Gobernador Axel Kicillof tendrá que aumentar las restricciones en los próximos 15 días para poder aplanar el pico de la Pandemia, que puede llegar a provocar un colapso en la capacidad de camas del sistema de salud público”.