San Vicente | En el mes de mayo de 1990 abrís sus puertas el bar y cafetería Boston, en la emblemática esquina de avenidas Sarmiento y 25 de Mayo, en el pleno corazón de la ciudad de San Vicente. Hoy, a 35 años de aquel día, Boston sigue dando batalla y es elegido día a día por un sinnúmero de clientes que buscan calidad, calidez y muy buena atención.
El Boston que hoy todos conocemos, hace 35 años era bastante distinto. Luego de que en ese lugar funcionara por varios años el emblemático Bar El Ideal de Osvaldo “Gordo” López y, tras su cierre, la heladería de Jorge “Lechuga” López, abrió Boston de la mano de Marcelo Razeto, “Chiche” Fernández y su hijo Leo.

Boston fue reconocido por el intendente Nicolás Mantegazza, por los 35 años de vida.
Tras la renovación del local en 2004, que todavía tenía una sola planta, la sociedad la pasaron a conformar Marcelo Razeto, Ricardo Paiatti y Daniel Rufet, este último hasta la primera década del Siglo 21.
Para el año 2011, vendría el gran cambio en Boston. Vino la segunda remodelación del local, la construcción de una segunda planta y la reconversión de bar y cafetería en bar y restó, agregando al menú exquisitos platos a los almuerzos y cenas.
Hoy, Marcelo Razeto, el iniciador de este gran emprendimiento que ha pasado y sufrido varias crisis económicas del país, sigue al frente, acompañado por el inefable Ricardo Paiatti, tal vez la cara visible de Boston, hoy en día acompañado por la frescura de su hijo Franco, el “Hercule Poirot” de San Vicente.


El pasado 2 de mayo, el intendente sanvicentino Nicolás Mantegazza y su esposa Daniela Lassalle, sorprendieron a la familia de Boston con un reconocimiento, entregándoles una placa alegórica a la fecha.
Sin descalificar a los comercios del mismo rubro, Boston es sinónimo de San Vicente, lo que se dice un clásico, un lugar elegido por cientos de sanvicentinos y visitantes del distrito para pasar un momento ameno con sus amigos, familiares o en solitario. Felicidades Boston, por otros 35 años más.