“Quiero proponer que esta ley lleve el nombre de Silvio. En nombre de él, y reconociendo a los nueve trabajadores de la salud que han perdido la vida, y en honor a esos 900 trabajadores de la salud que ya han sido contagiados, les pido a los diputados que acompañen esta ley”. Con estas palabras, el diputado Eduardo “Bali” Bucca, arengó a sus pareas a votar esta ley en la Cámara de Diputados.
El titular del interbloque Federal se refería a Silvio Cufré (48), el enfermero de Alejandro Korn que falleció en el hospital de la Cuenca Alta de Cañuelas, luego de contagiarse de COVID-19 en una clínica privada de Brandsen, lugar donde cumplía tareas. Esta medida, que crea un Programa de Protección al Personal de Salud, obtuvo media sanción por unanimidad (251 votos).
Realizan un nuevo abordaje sanitario en otros tres barrios alejandrinos.
Durante su exposición en la sesión virtual, el legislador reafirmó su posición de continuar con el aislamiento y cuestionó a quienes piden ponerle un punto final. “Tengamos mucho cuidado con la responsabilidad, con la cordura, al momento de manifestarnos públicamente. No hemos salido de ningún lugar. Aquí no ha terminado nada. No hay nada para festejar. Tenemos días y meses complicados por delante”, afirmó.
Bucca remarcó que lo que busca el proyecto es “evitar que las camas de los hospitales y las clínicas sean ocupadas por el personal de salud”. “Pongámonos por un momento del lado de los médicos y enfermeros, y pensemos lo que significa salir a trabajar cada día y enfrentar una situación tan difícil sin inmunidad. Estamos a tiempo de tomar las decisiones pertinentes para blindar la salud de los protagonistas”, consideró.
Detalles
La iniciativa, que consta de 11 artículos, declara “prioritaria para el interés nacional la protección de la vida y la salud del personal del sistema de salud argentino y de los trabajadores y voluntarios que cumplen con actividades y servicios esenciales” en el marco de la pandemia.
El principal objetivo del programa será la prevención del contagio del coronavirus y alcanza a “todo el personal médico, de enfermería, de dirección y administración, logístico, de limpieza y demás, que presten servicios en establecimientos de salud donde se efectúen prácticas destinadas a la atención de casos sospechosos, realización de muestras y tests, y/o atención y tratamiento de COVID-19, cualquiera sea el responsable y la forma jurídica del establecimiento”.
“También será de aplicación obligatoria para aquellos trabajadores y voluntarios que presten actividades y servicios esenciales durante la vigencia de la emergencia sanitaria”, agrega el proyecto de Bucca.
Una de las medidas concretas del programa será que los establecimientos de salud se organicen de modo que “sean los trabajadores de menor edad quienes estén a cargo, de forma prioritaria, de la atención de casos sospechosos, toma de muestras, atención y tratamiento de pacientes de Covid-19”.
Asimismo, quienes estén a cargo de estas tareas deberán utilizar un distintivo que permita “su fácil identificación”.
Las clínicas y hospitales deberán “garantizar medidas de bioseguridad en las áreas de los establecimientos dedicadas específicamente a la atención y toma de muestras de casos sospechosos o confirmados de Covid-19, como así también en aquellas áreas en que haya un mayor riesgo de contagio”.
Otro artículo del proyecto ordena establecer protocolos de protección y capacitaciones destinados a la prevención del contagio de “aquellas personas que cumplan con actividades y servicios esenciales que impliquen exposición al contagio”.