San Vicente | El bloque de concejales de Juntos por el Cambio presentó un pedido de informes en el Concejo Deliberante sanvicentino, para que el Ejecutivo municipal comunique los pormenores de una fiesta clandestina que se realizó el pasado sábado en el camping de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), y las razones por las que el área de Protección Ciudadana no la desactivó a pesar de las numerosas denuncias telefónicas de vecinos.
El pedido, redactado por la concejala Cecilia Esquivel hace mención al Decreto de Necesidad y Urgencia por el cual el gobierno nacional oficializó las nuevas restricciones para combatir la segunda ola del coronavirus; y el Decreto 178/2021, mediante el cual el gobierno provincial oficializó las nuevas restricciones, en concordancia con el decreto nacional.
En los considerandos del documento, los concejales opositores recordaron que, “mediante dichos decretos se establecen restricciones en el ámbito de los distritos que se encuentran en Fase 3, entre ellas la suspensión de actividades y reuniones sociales en domicilios particulares, salvo para la asistencia de personas que requieran especiales cuidados; eventos religiosos en espacios públicos al aire libre con concurrencia máxima de 30 personas; reuniones sociales en espacios públicos al aire libre con concurrencia máxima de 20 personas; suspensión de actividades en cualquier salón de fiestas, práctica deportiva de cualquier deporte en lugares cerrados solo hasta 10 personas”.
Esquivel recordó, además, que “entre los distritos encuadrados en esta fase se encuentra San Vicente y que el día sábado 10 del corriente, mediante las redes sociales, vecinos del barrio UPCN manifestaron haber denunciado ante las autoridades, la ocurrencia de una fiesta privada en las instalaciones del Camping de la UPCN; y que mediante fotografías registraron la presencia de numerosos autos, y gran cantidad de gente en los quinchos del mismo, denunciando la presencia de alrededor de 100 personas”.
También consideró que esa tarde llovía, por lo que no hubiera podido hacer ninguna actividad al aire libre; y que “desde el municipio se dieron respuestas vagas, y no se intervino para cancelar dicho evento”.
En su artículo 1, el pedido de informes establece que “se vería con agrado que el Departamento Ejecutivo Municipal, a través del área que corresponda, informe qué evento se realizó en las instalaciones del Camping UPCN el día 10 del corriente; si el mimo se encontraba debidamente autorizado por las autoridades municipales; y si no estaba autorizado, por qué no se procedió a su cancelación y qué medidas se tomarán en contra de los organizadores y/o de los propietarios de las instalaciones”.
Sería bueno que el oficialismo no imponga su mayoría en el Concejo, como viene haciendo hasta ahora, y que informe sobre lo sucedido el sábado pasado. No solamente, porque la oposición lo quiere saber, sino porque el pueblo quiere enterarse de lo que sucedió.
Este es un hecho muy grave, aunque se lo quiera minimizar. Hay que conocer el nombre del o los organizadores, los motivos por los que el área de Protección Ciudadana no actuó, cuando existieron decenas de llamados al teléfono 147 denunciando el evento. También deberán aclarar si es cierto que, a dicha fiesta asistieron funcionarios municipales encargados del control de este tipo de eventos, como se denuncia en las redes sociales.
Sería muy bueno que todo se aclare, que no quede en la nebulosa, como por ejemplo, el pedido de informes sobre la “vacunación VIP” de una empleada municipal muy cercana al intendente Nicolás Mantegazza, hecho del cual la oposición dice tener pruebas fehacientes del mismo. Si las tienen, ¿por qué no las hacen públicas, o esperan utilizarlas como golpe de impacto para la campaña electoral que se avecina?