San Vicente | El pasado martes, este medio de comunicación publicó una nota sobre una denuncia realizada por el presidente del Consejo Escolar de San Vicente, Fernando Vitaller, sobre un hecho de corrupción acontecido en la Escuela Primaria 16 Carlos Ibáñez del Cruce del Cementerio, en donde dos auxiliares fueron atrapadas en flagrancia robando comida del comedor del establecimiento educativo.
En un posteo de Facebook aparece la porta de este medio con la leyenda cruzada “Medio no grato entre auxiliares, repudiamos su falta de ética”. Tal vez omitieron la frase “Medio no grato entre auxiliares corruptos” y metieron en la bolsa a auxiliares honestos, que los hay y muchos.
En esa nota, Al Sur Web publicó el nombre de las implicadas, María Fernanda Ibañez y Viviana Rivero, que fueron “pescadas” por el funcionario público cargando dos baldes de comida en un automóvil. En uno de los baldes había arroz elaborado y el otro estaba lleno de pechugas crudas camufladas entre el arroz.
A partir de ese momento, estos personajes y todos los auxiliares que vienen viviendo de la “teta” del estado por muchos años, comenzaron a atacar la figura de Vitaller y de este medio de comunicación, por el solo hecho de denunciar y señalar un hecho de corrupción, lisa y llanamente, aunque lo quieran maquillar de otra cosa.
Y todo esto con la ayuda de algunos medios de comunicación y comunicadores sociales que, inmediatamente, tomaron partido por los corruptos, romantizando el hecho, diciendo que esto “ocurre desde hace años”, “es una costumbre”, “son sobras”, “sino hay que tirarlos”, etc.
Que ocurre hace años puede ser, que es una costumbre está claro, pero no son sobras. Es un plan quirúrgicamente ideado por estos auxiliares, que desde hora muy temprana ya saben a cuantos chicos tienen que darle de comer, pero sin embargo cocinan para más del doble. El motivo es claro, tienen que llevarse las “sobras” para su hogar.
Rogamos a las autoridades pertinentes que esta denuncia llegue a buen puerto y que estos corruptos, que no tienen empacho en robarse la comida de los pibes, sean echados de sus trabajos; y que de ahora en más haya un control más severo en todas las escuelas del distrito para que la comida vaya a donde tiene que ir.
Los que más lamentamos desde Al Sur Web no es el ataque de los auxiliares de las escuelas (seguramente no son todos porque, como en todos las ámbitos, hay gente mala y gente buena), sino la defensa férrea de algunos medios de comunicación a este sistema de corrupción, tan enquistado en la sociedad.
El ladrón cree que todos son de su condición.