La Plata | Con presencia de activistas y militantes, en el Tribunal en los Criminal 2 de La Plata, se desarrolló la quinta audiencia del juicio que se le sigue a Luis Alberto Ramos como coautor del homicidio del joven trans Tehuel de la Torre. La audiencia se reanudará el jueves 25 de julio; y un día mar tarde, se esperan los alegatos.
Ayer declararon peritos psicológicos del Ministerio de Seguridad, una compañera de militancia del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) de Tehuel y de Ramos, y un testigo ocular del allanamiento realizado por la Policía Bonaerense.
En el transcurso de la audiencia, el Tribunal rechazó el pedido de los abogados representantes de Norma Nahuelcurá (madre de Tehuel), quienes solicitaron incorporar un testimonio de una representante de la comunidad trans “útil e indispensable para entender la realidad de primera mano”.
Luis Ramos es enjuiciado como coautor del homicidio del joven Tahuel de la Torre.
Karina Sorokowki, psicóloga del equipo de la Dirección de Análisis de la conducta Criminal y Victimología del Ministerio de Seguridad de la Provincia, fue la responsable de realizar dos entrevistas a Luis Ramos, para establecer un perfil en el marco de la investigación por averiguación de paradero de Tehuel.
En este marco, la licenciada aseguró que notaron “quiebres en el discurso” de Ramos. “Pudimos observar una persona que, en un principio, se mostró colaboradora, predispuesta, con un diálogo locuaz, queriendo agradar, verborrágico en su discurso”, dijo y agregó que “no obstante, lo que nosotros observamos es que estas características son manipuladoras”.
Indagada al respecto, Sorokowki explicó que, en las causas por averiguación de paradero, se busca que el entrevistado empatice con la víctima. “Era lógico en su discurso, pero la falta de afectividad, la falta de emotividad, la falta de empatía a nosotros nos dice que el discurso es para protegerse”.
Según lo reconstruido durante la audiencia, Ramos podía describir las vivencias compartidas con Tehuel, pero no las emociones. “Era un discurso defensivo y exculpatorio”. Además, la testigo destacó que “nos llamó la atención el remarcado acompañamiento a su identidad sexual”, por parte del acusado.
Andrea Licolich conoció a Luis Ramos y a Tehuel de la Torre militando en el MST de San Vicente. Durante su testimonio en el juicio, contó que fue Ramos quien acercó a Tehuel a la militancia y que lo presentó como “una amiga.” También que entre ambos había “una buena amistad”, pero que en un momento ella le sugirió a Tehuel “que se aleje de esa amistad porque yo había notado que Luis no la veía como hombre”.
La testigo afirmó, además, que Ramos había dicho que “era un desperdicio de mujer haberse vuelto hombre”. Y agregó que, en el movimiento, consultaban a los militantes sobre a qué actividades preferían ir o no ir, y que el acusado creía que “la mujer era para el hombre y el hombre para la mujer”.
Licolich también dio cuenta de una conversación con Tehuel en la que cuestionó por qué seguía vinculada con Ramos y que él “le ayudaba económicamente si necesitaba algo”.
La jornada giró alrededor de un tópico: ¿se encontraba Ramos en una situación de poder con respecto a Tehuel de la Torre?
La pregunta apareció tanto en el testimonio de la psicóloga que entrevistó al acusado, como en el de los psicólogos que entrevistaron a los familiares de Tehuel. El Tribunal quiso saber e indagó, de qué hablamos cuando hablamos de poder.
Se sabe que el joven se encontraba en una situación de vulnerabilidad social, que buscaba trabajo y que era Ramos quien solía proveerlo, tanto con trabajos informales como con dinero.
“La familia dijo que la relación que tenía con Luis Ramos tenía que ver con lo laboral y que además de lo laboral eran amigos, porque era alguien a quien Tehuel tomaba como un par, que lo escuchaba”, aseguraron Juan Pablo Díaz y Belén Gallego -psicólogos del Ministerio de Seguridad, encargados de entrevistar al entorno del joven.
Fuente: agenciapresentes.org