Guernica | La Trocha o las vías del ex Ferrocarril General Belgrano es una porción de tierra que siempre partió en dos a la ciudad de Guernica. Siempre fue un lugar agreste, sucio y peligroso. Tras dejar de funcionar el tren que unía los puertos de La Plata y Campana, suponíamos que los gobiernos municipales que ha tenido Presidente Perón, reclamarían esas tierras para uso y beneficio de los vecinos. Pero no.
Esta traza siempre separó a la ciudad de Guernica. De un lado quedaban los barrios 25 de Mayo, Santa Rosa de Lima, Parque Americano, Panamérica y San Martín. Al norte, el resto de las barriadas guerniquenses. Siempre fue un lugar plagado de cañas y un sitio elegido por la gente de malvivir para robar a transeúntes y hasta violar a mujeres que pasaran por ahí.
Si Oscar Rodríguez, su hija Silvina, Aníbal Regueiro o Carina Biroulet hubieran tenido un pequeño haz de creatividad durante sus gestiones al frente del Municipio, hoy ese lugar estaría convertido en un lugar de esparcimiento para los peronenses.
Desde el paso a nivel de la calle 39 hasta la estación de Villa Numancia hoy deberían existir paseos públicos, plazas saludables, senderos aeróbicos, playones deportivos o simples lugares arbolados para que los vecinos puedan distenderse y pasar un momento agradable en familia.
Sin embargo pasa todo lo contrario. Se sigue teniendo un lugar con cañaverales y con enormes zanjones llenos de la basura que los propios vecinos depositan.
Sabemos que la difícil situación económica del país y el estado en que ha recibido el Municipio Blanca Cantero no permite pensar en realizar grandes obras de infraestructura en este lugar, pero al menos habría que sanearlo, realizar el zanjeo, juntar la basura, bajar los terraplenes y aplanar el terreno. Con pocos recursos y a mediano plazo, se podría cambiar la fisonomía a este lugar y convertirlo en un lugar de encuentro de los peronense.