Guernica | En la noche de ayer, el hospital Cecilia Grierson de Guernica se vio envuelto en una trama policial, luego que una enfermera que presta tareas en ese centro de salud, huyera del lugar tras ser hisopada para establecer si se había contagiado de COVID-19.
Dio negativo el test de la trabajadora del CAPS Eva Perón de Guernica.
Como lo indica el protocolo en estos casos, el paciente hisopado tiene que ser aislado hasta que se obtenga el resultado del test. Lejos de todo esto, la mujer que fue identificada como María de los Ángeles Pozueco, llamó un remís y se escapó del aislamiento, tomando rumbo desconocido.
Tras ser informada, la Justicia de turno libró el pedido de captura para la auxiliar, que vive en la localidad de Alejandro Korn. Tras las primeras indagaciones, la mujer fue localizada por la fuerza policial y trasladada al hospital de la Cuenca Alta “Néstor Kirchner” de la localidad de Cañuelas, donde esperará –con custodia policial- el resultado del estudio correspondiente.
En el hecho, caratulado como “propagación de enfermedad peligrosa y contagiosa; y violación de medidas y propagación de epidemia” interviene el Juzgado Federal 2 de Lomas de Zamora.