San Vicente | Los Vecinos Autoconvocados en Defensa de la Laguna del Ojo (VADL) están en pie de guerra, por lo que ellos consideran una actitud pasiva del Municipio, que no hace cumplir la Ordenanza 5033, que prohíbe el movimiento de suelo, la realización de obras de cualquier índole y apertura de calles en la zona aledaña al espejo de agua sanvicentino, conocido como los humedales.
Esta ordenanza fue aprobada los primeros días de noviembre del año pasado, pero desde su implementación “se continúan rellenando terrenos, construyendo contrapisos y paredes, instalando quinchos y hasta piletas de natación cuando la Ordenanza es bien clara con respecto a este tipo de actividades”, declararon a Al Sur Web desde el movimiento ambientalista.

El artículo 1 de la normativa expresa que el Municipio deberá “disponer preventivamente la restricción de uso de suelo que conlleva el impedimento de realizar construcciones y obras de cualquier índole, movimiento de suelos, apertura de calles -que no fueran dispuestas por el Departamento Ejecutivo por resolución fundada- en la zona definida según plano adjunto en anexo 1.
El lugar en cuestión es el barrio “Mundo Natural”, que se encuentra ubicado entre la avenida Rivadavia y la Laguna del Ojo, sobre los humedales de este espejo de agua. “La ordenanza establece que esta restricción quedará condicionada a la demarcación definitiva de la línea de la ribera que tiene que definir la Autoridad del Agua”, explicó Juan Silva.
“Desde que se comenzó a comercializar el barrio ilegal “Mundo Natural” comenzamos una lucha para defender los humedales”, afirmó Vergara, quien fustigó duramente la “actitud pasiva y cómplice” del Municipio sanvicentino. VADL considera que la Comuna ni sus funcionarios nunca se ocupó de hacer cumplir la ordenanza.
“Hicimos todo el trabajo que tendría que haber hecho el Municipio. Presentamos informes técnicos sobre el área natural en conflicto, dimos aviso a distintos organismos como la Autoridad del Agua y el OPDS y hasta tuvimos que contratar un abogado ambientalista”, aseguró el integrante del colectivo ecologista.
Este Gobierno nunca se caracterizó por defender los recursos naturales que tiene San Vicente. Tuvo una encargada del área de medio Ambiente totalmente ausente e hizo prosperar distintos emprendimientos prohibidos en el territorio sanvicentino, como la tosquera de Domselaar o el centro comercial que se está construyendo en el ejido lagunero, zona declarada como Reserva Natural por el Gobierno bonaerense.
“Queremos que se comprenda la importancia de este ecosistema. Además de ser un purificador natural de agua, los humedales dan refugio a muchísimas especies silvestres y tiene la gran función de retener millones de litros de agua en periodos de lluvias intensas”, explicó Silva. “Si rellenan los humedales, el agua va a ir para nuestros hogares”, concluyó.